Salimos temprano, a las 6 de la mañana ya teníamos el auto cargado a más no poder  con dirección sureste. El recorrido que llevamos fue el de la figura, buscando esos nombres en los carteles de la ruta. La ruta en general está bastante bien y para ser un 2 de enero, un supuesto inicio de la quincena de vacaciones no había tanta gente, muy tranquila la ruta, al parecer la gran mayoría de la gente sigue eligiendo la costa atlántica.

Algunos detalles para tener en cuenta en la ruta, después de Cañuelas cuando buscábamos el camino para seguir para San Miguel del Monte íbamos buscando el cartel que nos indicara el camino, cuando lo encontramos doblamos a la izquierda como indicaba el cartel, pero enseguida unos metros después hay otro que indica "Monte", algo que da un poco de confusión, seguramente el cartel estaba roto o algo viejo como este tramo de ruta, pero seguíamos en el camino correcto.

Sin mayores problemas en el tramo hasta el cruce de la ruta 76 con la 51 con dirección Coronel Pringles, los carteles no es algo que abunden pero el camino tampoco es complicado, hasta justo el cruce de estas dos rutas. El cartel que tendría que decir " <- Coronel  Plingles" (flecha apuntando para la izquierda), estaba junto con Tornquis y algún otro lugar, metros antes de la bifurcación, pero el detalle, toda la franja vertical donde tendrían que estar las flechas indicando direcciones no estaba, digamos que parecía que el viento había arrancado ese lugar, ¿casualidad? no lo sé, pero nos comimos el amague y tuvimos que pegar la vuelta a los pocos metros, cuando vimos el próximo cartel.

Llegando a Villa Regina nos sorprendió un intento de autopista imponente, estaba en plena construcción, la verdad que se veía muy buena, pero por la pinta y toda la tierra movida que había (2 de enero 2010) parece que los muchachos iban a tener para rato. Una cosa nada mas de este lugar, de noche, cuidado, no creo que esté muy claro por donde sigue el camino, porque tiene varios desvíos, baja y sube de la ruta porque están arreglando la otra media calzada.

Llegamos a Neuquén capital a eso de las 7 de la tarde, con 13hs de viaje muy cansados, después de haber atravesado La Pampa y casi todo Neuquén (provincia) con esas rutas derechas interminables sin una curva, paramos a dormir  en un pequeño hotel cerca del aeropuerto sobre la ruta nacional 22, ya casi saliendo de la capital.

En el primer día de viaje

Al otro día a la mañana, tipo 7am, desayunamos y partimos, para terminar el último tramo. Hasta Piedra del Aguila el camino no presenta variaciones, después es cuando viene la parte divertida y los paisajes por lo que hicimos 1600Km.

De que hablo? Subidas, bajadas, curva y contra curva, con los diques a los pies de la ruta y de un momento a otro aparece el imponente Volcán Lanín (si mi brújula mental no falla) de fondo. Así de divertido como se ve también es de peligroso, ahí que ir con cuidado. La ruta está bastante bien, pero hay tramos que se notan sufridos por la nieve y el hielo que en época invernal.

Unos quilómetros antes de llegar a Junín de los Andes, después de bajar en una curva nos encontramos con un cartel, "Puente mano única" y al terminar la curva, efectivamente, un puente con una sola mano, no me refiero una para ir y una para volver, sino se va y se viene por la misma mano, en el puente entra un solo auto, así que sacando un turno imaginario esperamos para pasar.

Después del puente, la ruta se destruye por unos 5Km y después mejora el estado. Igual se veían máquinas a los costados, por lo que parece que estaban trabajando para pavimentar. Pasando Junín de los Andes, a pocos quilómetros vas entrando de apoco en el esperado San Martín de los Andes.

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